16 Sep · Malanie Fajre · No hay comentarios
A veces sucede que batallamos con nuestros pollitos para llevarlos a la cama, y al final, terminan exhaustos los dos. Pero, introducir el yoga para niños antes de ir a dormir, puede ayudarlos a crear un trato con la almohada e incluso quedarse dormidos hasta el día siguiente.
Intentar el yoga después del baño y ponerse la pijama, pero antes de leerles el cuento. Participa con tu pollito para que los dos puedan relajarse juntos. Pueden probar con unas poses, y poco a poco ir añadiendo unas poses nuevas para que tu pollito se vaya acostumbrando.
Recuéstate boca arriba con las manitos en la barriga. Dile a tu pollito que comience tomando aire por la nariz (hasta 4), y luego bote el aire por la boca, igualmente hasta cuatro (4). Concéntrense en sus barriguitas, como suben y bajan. Respiren de ese modo desde que comienzan la rutina hasta que la terminan.
Este movimiento es muy bueno para comenzar, y ayudar a quitar el “sobresalto extra” que tenga tu chiquito o chiquita. Para este movimiento hay que pararse derechitos, y tratar de alcanzar el cielo, como si quisieran tocar la luna. Luego toman aire, y mientras exhalan, doblan poco a poco la cadera hasta tocar sus tobillos. Tomar aire y botarlo contando hasta cuatro. En su próxima inhalación, traten de tocar la luna nuevamente. Continúen la serie de tres a cinco veces.
Acuéstense boca arriba, lleven sus rodillas hacia el pecho y abrácenlas. Lleven su frente lentamente hacia las rodillas. La concentración debe estar en apretar fuerte y crear tensión. Aprovecha este momento para hacer caritas cómicas con tu pollito. Inhalar nuevamente, y al momento de botar el aire, suelten y relajen todo su cuerpo hasta quedar pegaditos al piso otra vez. Repetir esto de tres a cinco veces.
Si ven que los problemas para ir a la cama no cambian de inmediato, ¡no se desesperen! Y traten de no convertirlo en algo muy serio. Este es un momento para poder relajarse y lo más importante, ¡divertirse! Ya que mientras esto sea así, tu pollito querrá hacerlo constantemente. Sigan intentando, y verán que poco a poco las batallas se tornarán en momentos de tranquilidad. Namaste!
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