21 Sep · Catherine Perez · No hay comentarios
La imaginación no tiene límites. Pareciera que los humanos a medida que pasa el tiempo vamos perdiendo esa capacidad de imaginar y crear, de sentirnos capaces de alcanzar hasta la Luna. Pero debemos recordar que la imaginación es única, inigualable y jamás debemos perderla. Al contrario, debemos cultivarla, incentivarla y desarrollarla, en especial en nuestros amados pollitos, ya que si son unos pequeños sanos, fuertes y creativos, explotando al máximo todas sus habilidades, serán unos adultos admirables y luchadores, capaces de ir tras sus sueños y lograrlos.
La Naturaleza ofrece infinitas maneras de desarrollar al máximo la creatividad de tus hijos. ¡Es increíble! Te invitamos a conocerla, explorarla, cuidarla y sacarle provecho. Desde jugar con elementos como el agua o la tierra hasta encontrarle el uso más divertido a un conjunto de piedras que encontraron en el jardín. Permíteles conocer a su Planeta y sobre todo, a valorarlo y cuidarlo.
Imagina que van al jardín y tus consentidos deciden recolectar piedras pequeñas. ¿Qué hacer con ellas? La respuesta es sencilla, deja que su imaginación vuele. Escribir sus nombres con acuarela, recolectar 27 rocas y pintar una letra del abecedario en cada una. De esa manera no sólo se distraen e imaginan, sino que es una buena manera de que aprendan las letras ¡jugando! Pueden también crear una pista de carreras, pintar y armar el Sistema Solar, en fin, el cielo es el límite.
Abecedario hecho en piedra. Piedras pintadas y decoradas
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Los pollitos de la casa pueden también jugar con agua. Es divertido, sano y los verás reír sin parar. Permite que descubran por si solos qué pueden hacer con ella: colocar barquitos de papel y dejarlos correr por el pequeño canal remanente que queda cuando estás regando las matas del jardín, mojarse entre ellos, colocar colorante en el agua y luego pintar flores. Puedes también conseguirles un libro de fauna y flora y dejar que salgan a identificar a los animalitos y flores del jardín o el parque, es decir, que se conviertan en unos mini exploradores, biólogos o científicos. Esto último les encantará, pues los niños son curiosos por naturaleza y les fascina explorar y descubrir cosas nuevas.
Niños jugando con agua. Pintando flores con agua y colorante.
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Permíteles armar una pequeña carpa, ya sea con mantas, periódicos, lo que ellos encuentren. Que se reúnan con sus amiguitos, primos o hermanos, y ¿por qué no? ¡Contigo! Merienden afuera, exploren, disfruten del aire libre, del verde de los colores y olores. Además, es allí donde ellos se imaginan mundos desconocidos, creados por ellos mismos. Ven lo invisible, porque de eso se trata la imaginación. Concédeles el ser niños y disfrutar de su Medio Ambiente. La Naturaleza es mágica y divertida, sólo tienen que salir a descubrirla.
Picnic familiar
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