Thursday, November 29, 2012

Cómo ser #mamástrabajadoras y no morir en el intento


Por más que quisiéramos disfrutar a nuestros pollitos cada momento del día (sobre todo cuando están pequeños), muchas debemos ausentarnos de casa y volver a la realidad, es decir, al trabajo. Cuando eso ocurre, un gran porcentaje de nosotras encontramos la salvación dejando a los “peques” con sus abuelos, pero el sentimiento de culpa por esas horas de ausencia pudiera asechar. Antes de que eso pase, seamos proactivas. El hecho de que no estemos con nuestros hijos las 24 horas del día no quiere decir que no podamos valernos de uno que otro truco para estar presentes en su cotidianidad de alguna u otra forma, así que presten atención:  
¡Santa tecnología! Acorten la distancia que hay entre su oficina y la casa de sus padres (o suegros) para comunicarse con sus hijos, valiéndose de herramientas que les permitirán no sólo hablar con ellos, sino también verlos. Skype o Facetime son sólo algunas de las opciones a mano que pueden utilizar de forma completamente gratuita. Con sólo 5 minutos que tomen de su hora de descanso podrán alegrarle el día a sus nenés con una video llamada. Así, podrán saber cómo les fue en el colegio, qué cosas han hecho con sus abuelitos, guiarlos con las tareas, y ¡por supuesto decirles cuánto los aman! 

Foto cortesía de: Lilsugar.com
Ring, ring. Estén en contacto por teléfono para saludar, monitorear y supervisar. Lo ideal es que la madre mantenga su autoridad y procure participar lo más posible en su crianza, cosa que puede hacer incluso a distancia con frecuentes llamadas telefónicas para chequear que todo esté bien y conversar con el niño. Además, permitan que sus pollitos las llamen a la oficina al menos por unos pocos minutos para oír sus voces y sentirlas más cerca. 

Cuiden la coherencia. Es muy importante que se pongan de acuerdo con los abuelos para que compartan y sigan las mismas pautas de crianza. De esta manera, sus pollitos no recibirán mensajes contradictorios. Lo que se busca es que lo aplaudido por unos no sea cuestionado por los otros.
Foto cortesía de: http://grandmas-dreams.tumblr.com


Sorpréndanlos. Visto que los abuelos son sus grandes aliados, aprovechen para que sean sus cómplices en algo que encantará a sus chicos… Reconozcan sus méritos por hacer la tarea, bañarse, hacer caso, comérselo todo, entre otras, dejándoles pequeños detalles con quien los cuide. La idea es que cuando sus pollitos hagan una buena acción, su abuelito(a) le entregue “de parte de mami” el detallito. De esta forma no sólo se harán presentes de alguna manera, sino que también reforzarán conductas positivas.  




Pónganse al día durante el fin de semana. Los sábados y domingos, compensen su temporal ausencia física de la semana. Compartan actividades de su agrado y refuercen el mensaje “soy tu mama, te quiero y me importas mucho”.

Recuerden que es imposible ser mamás omnipresentes y que no hay una mamá perfecta. Lo que sí podemos es hacer nuestro mayor esfuerzo por ser cada día mejores madres, así que ¡manos a la obra! 

Wednesday, November 28, 2012

El look de Santa: en manos del más chiquito de la casa


¡¿Recuerdan aquellas revistas que traían la silueta de una linda muñequita a la que podíamos recortar y vestir a nuestro antojo gracias a los muchos vestidos y accesorios que la acompañaban?! Pues, aunque  hace años que no vemos una de éstas, encontramos algo que permitirá que sus pollitos se diviertan tal y como ustedes lo hacían en su niñez. 
En esta navidad, sus peques decidirán cuál será el look de "Santa". Sólo impriman esta hoja con el  gordito bonachón más querido del planeta y ayuden a sus chiquitos a recortarlo junto a los 3 atuendos que trae como opción para su guardarropa. Si quieren maximizar la diversión y explotar la creatividad de sus hijos, pueden imprimir este boceto usando únicamente el cartucho de tinta negra para que, además de recortar y combinar las figuras, sus niños también las coloreen. 
Esperamos que se diviertan con este abreboca navideño... jo, jo, jo!
Ilustración tomada de: http://storage.canalblog.com

  


Tuesday, November 27, 2012

¿Cómo anunciar la llegada de un #hermanit@?


Cuando sabemos que esperamos un nuevo bebé, algunas corremos a darle la buena nueva a nuestros hijos. Sin embargo, no todos los chicos reciben con bombos y platillos aquello de: “¡¿adivina qué?! ¡Vas a tener un hermanit@!”. Pero no se desanimen. Es absolutamente normal que quienes hasta ese momento eran “hijos únicos” sientan temor ante lo que se avecina. Al fin y al cabo nunca antes habían tenido que compartir la atención y muestras de afecto de sus padres.

Foto cortesía de: Fanpage de Inn On Crescent Lake

Así pues, no se extrañen si al darles “la noticia” sus pequeños (en especial aquellos menores de 5 años) comienzan a dar muestras de:
·     * Irascibilidad (pataletas, ataques de rebeldía, etc)
·      * Inapetencia
·      * Alteraciones del sueño
·      * Apego extremo hacia los padres
·      * Dificultades de socialización en la escuela
·      * Menor control de esfínteres

No obstante, todo está en el cómo lo comuniquemos y en cómo manejemos la situación después. Lo más importante es transmitir la información con palabras sencillas, en un tono positivo y con total naturalidad, para luego aclarar sus dudas, disipar sus temores y mimarlos . A continuación algunos tips que les serán de mucha utilidad:

¿Cuándo? No hay un momento específicamente indicado como ideal para dar esta noticia a un hijo, pero algunos padres prefieren hacerlo luego de superados los 3 primeros meses de embarazo (momento cuando, por lo general, pasan los mayores riesgos de una pérdida y comienza ya a notarse la pancita de mamá)

¿Qué decir? Al comienzo del embarazo cuéntenle que “papi y mami” tendrán otro bebé; que su hermanito está creciendo dentro de sus barrigas tal como ellos lo hicieron antes de nacer (pueden apoyarse en fotos y ecosonogramas de su embarazo para ayudarlos a entender); cuéntenles además en qué época del año llegará el bebé (navidad o vacaciones, por ejemplo), entre otros.

Ante las preguntas… Aplaquen su curiosidad y respondan sus inquietudes sin abrumarlos con más información de la debida. Permítanle digerir la noticia poco a poco. “Se trata sólo de calmar su ansiedad y lo que más le tranquilizará es saber que sus mayores parecen tener respuesta para lo que a él le preocupa”, opina al respecto el portal http://bebe.consumer.es.

Mantengan los celos a raya. Tal como sostiene el portal Revistabuenasalud.com, mientras menos se vea alterada la dinámica padres- hijos, menor será la aprehensión de estos últimos ante la llegada del nuevo bebé. “Lo más importante para ellos será constatar que su mamá siga siendo la misma en cuanto a mimos y protección, aún cuando esté visiblemente cambiada, más cansada o cuando deba permanecer en reposo”, informa este website.

Foto cortesía de: www.pinkpistachio.com

Resalten lo bueno. Antes de que sus pequeños siquiera comiencen a pensar en lo que podrían perder a causa de este hermanit@ (como la exclusividad de sus padres o del cuarto, por ejemplo), subrayen todas las cosas maravillosas que ganarán como tener a su mayor cómplice y amigo viviendo bajo el mismo techo, poder enseñarle todo lo que saben a su herman@, compañía segura para jugar y hacer equipo, etc. Además, enfaticen lo positivo de convertirse en el hermano mayor (bañarse solit@s, ir a pasar la noche en casa de sus abuelos, escoger el/ella mism@ lo que se va a poner, etc).

Permitan que sus hijos sean parte activa en el proceso. Calmen su ansiedad involucrándolos en los preparativos para la llegada de sus hermanit@s: desde la escogencia del nombre, hasta la preparación del cuarto, entre otros.

Planifiquen por adelantado. Cuando el momento del alumbramiento llegue, lo más probable es que deban permanecer en el hospital al menos por un par de días, así que dejen todo lo relacionado al cuidado de sus hij@s en manos de  sus familiares más cercanos (mamás o esposos, por ejemplo) o amigos de gran confianza.

Ahora que ya conocen todas estas estrategias, anímense y dénle la noticia a sus pollitos. ¡Enhorabuena por el nuevo bebé!






Wednesday, November 21, 2012

Toma las mejores #fotos de tu #bebé


Al ver a nuestros chiquitos, en algún momento todas pensamos: “quisiera que se quedara así para siempre” (seguido del respectivo suspiro)… y es que cómo no desearlo, si cuando nuestros hijos son apenas unos bebecitos son ¡simplemente adorables! Aunque no hay genio que cumpla tal deseo, la fotografía bien puede ayudarnos a a capturar de alguna forma la magia de sus primeros añitos.

Gracias a las maravillas y facilidades que ofrecen hoy las cámaras digitales y los programas de edición, las sesiones de fotos están super de moda, y ¡¿qué mejor motivo para hacer una que guardar recuerdos de nuestros hijos mientras aun son unos pollitos?! Tranquilas: no necesitan ser profesionales del lente, ni hacer grandes gastos para que sus “peques” queden regios en sus fotos; sólo deben cuidar algunos detalles y tener en cuenta algunas consideraciones. Para ayudarlas, hoy les ofrecemos algunos tips para que logren las mejores fotos.

*Cronometren sus momentos de felicidad durante el día. Tras un ejercicio de observación, identifiquen los momentos del día en que sus bebés se muestran más a gusto y de mejor humor. Especialistas en el tema recomiendan tomar las fotos después de alimentar a sus pollitos y cuando ya empiecen a tener sueño, pues de esa manera estarán plácidos y no pondrán resistencia. Que estén a gusto se reflejará en cámara.
¡Cheese!
*Busquen aliados. Pídanle a su esposo, a un familiar o amigo que les de una mano durante la sesión. El protagonista de estas fotos es especial y atenderlo a veces amerita toda una logística. La idea es que mientras ustedes disparan las mejores fotos, su ayudante se encargue de distraer al bebé, sostenerlo, hacerlo reír, ponerlo en posición, etc.
*Tomen ideas. Herramientas como Flickr, Pinterest, etc, pueden ser su mayor fuente de inspiración, así que ¡aprovéchenlas dándole un vistazo a las fotos de bebé que allí puedan encontrar! Una vez que tomen algunas ideas, planeen el concepto que quieren desarrollar en sus fotos, como luces, decoración y escenarios a usar.
*Eliminen elementos discordantes del set. Por el contrario, asegúrense de  incluir elementos que refuercen el concepto de sus fotos como juguetes, almohaditas, un cachorrito, etc.
*Pónganse a su mismo nivel. Las fotos tomadas desde arriba (en plano picado) son asociadas con: aplastamiento, inseguridad, humildad, peligro, vulnerabilidad, debilidad, cansancio, etc. En cambio, situando la cámara a la misma altura de sus bebitos crearán una sensación de cercanía e intimidad.
*Eviten el flash. Aprovechen la luz natural pues el flash puede asustar a sus chiquitos.
*No traigan su nené al set hasta que no tengan todo listo. Recuerden que los bebés suelen incomodarse con facilidad y un ataque de llanto podría arruinar sus planes.
*Acérquense a los detalles. Nada más tierno que una foto que muestre los pies de un bebito en sus primeros meses, por ejemplo, así que ¡usen el  zoom sin temor!
*Enfóquense en la estrella de la sesión. Hacer zoom in sobre nuestros bebés, mientras desenfocamos el fondo es una técnica que siemre da buenos resultados.
*Apóyense en los colores de su atuendo. Busquen en su armario aquellas ropitas con los colores que hagan resaltar el color de su piel, ojos o cabello.

En el centro o a un lado del cuadro, tu bebé siempre será la estrella de la foto

*No hay reglas escritas. No todas las fotos deben ser convencionales. A veces, salirse un poquito de la norma nos brinda excelentes resultados. Que nuestro bebé aparezca siempre en el centro de la foto no es mandatorio. Pueden colocarlo a un lado de un fondo lindo que también quieran destacar.





*Registren cada época. Fotos sobre la salida de sus primeros dientecitos o de sus primeros pasos son temas que nos ayudarán a dejar registro de su desarrollo. Igualmente, pueden dejar constancia de la época del año en que fue captada la foto si suman elementos como un arbolito de navidad, por ejemplo.
*Prueben el blanco y negro. Fotos de este tipo evocan recuerdos, y eso es precisamente lo que queremos lograr.
*Resalten sus diminutas proporciones. Coloquen la manito de sus bebés sobre la mano del papa, por ejemplo… así en algunos años podrán dar fe de cuán chiquitos eran sus hijos.  
*Atrapen su cotidianidad. Las fotos posadas son bonitas, pero nada como esas fotos en la que podemos pillarlos en momentos especiales. Capten a sus pollitos mientras “pelean” con el sueño, se embadurnan de compota, etc.
*No escatimen. Mientras más fotos tomen más posibilidades tendrán de obtener “la” foto especial que tanto buscan.
Cuando menos piensen pueden obtener una foto hermosa 
Si aplican estos sencillos consejos con seguridad obtendrán estupendos resultados. Sólo asegúrense de no crear sólo imágenes de sus bebés, ¡sino recuerdos!

Este post llega a ustedes por cortesía de Foto By Print, página web que permite crear de forma divertida y desde la comodidad de la casa productos personalizados usando fotos, textos e imágenes. Visítenlos en: www.fotobyprint.com

Tuesday, November 20, 2012

Acaba con el estrés al #viajar con tu #bebé


Cuando una mamá pasea a su bebé en un lugar público y abierto (como un parque o un centro comercial, por ejemplo) lo usual es que todo el mundo le sonría con ternura y se lleve a casa una coleccion de “awww, qué lindo tu nené!” Sin embargo, el panorama cambia por completo cuando el espacio se torna cerrado… ¿o acaso no has recibido una mirada fulminante cuando has viajado en avión con tu pequeñín? ¡Seguro sabes a lo que nos referimos!
Foto cortesía de: Parenting.com 
Para minimizar este efecto en tu próximo viaje compartimos contigo algunos tips que pueden ser de gran ayuda:

Si tu bebé es un pollito de apenas meses de nacido…
* En la medida de lo posible procura que el viaje no sea mayor a 2 ó 3 horas.
* Trata de viajar en horas de la noche para que tu bebé duerma durante el vuelo.
* Al momento de hacer la reserva de los pasajes, el portal Miaerolinea.com recomienda preguntar por la disponibilidad de puestos que ofrezcan un poco más de espacio que el resto, ya que es muy posible que necesites cambiar pañales o atender alguna contingencia al viajar con tu bebé.
* Ya a bordo, averigua si en el avión disponen de sillitas especiales para peques pues pudieran facilitarte la vida durante el vuelo (algunas aerolíneas las brindan como parte del servicio).
* Cierra la salida de aire acondicionado que suele estar sobre el asiento para que tu bebé no se incomode con el frío.
* Asegúrate de que tu equipaje de mano incluya: comida para el bebé, pañales, toallitas húmedas, un cambio de ropa en caso de que tu pollito ensucie la que lleva puesta, una manta para abrigarlo, una toalla de mano (para limpiar cualquier accidente) y alguno de sus juguetes predilectos (siempre que sea liviano). Para tí es importante que lleves una camisa extra en caso de que tu hij@ te ensucie.
* Tal y como informa el espacio http://voices.yahoo.com, “para disminuir el dolor de oídos durante el descenso, la AAP aconseja ofrecer al bebé el seno materno, o un biberón para que succione”.
* Si el bebé llora y no puedes calmarlo en el asiento, intenta caminando por los pasillos cuando la señal de “abróchese el cinturón” esté apagada.
Foto cortesía de: Etsy.com
Ahora bien, si tu pollito ya está un poco más grandecito…
* Podría ser de gran ayuda que pidas el asiento de la ventana, pues a los niños siempre les encanta asomarse a ver las nubes. También trata de que sus puestos estén ubicados cerca de los baños y, ¡por supuesto!,  asegúrate de que los puestos que les asignen estén juntos.
* Vístelo con ropa cómoda y, si el vuelo es de noche, considera llevarlo con la pijama ya puesta.
* Sorpréndelo en el avión con un arsenal de diversión: hojas y creyones para pintar, plastilinas, su película o programa favorito en tu tablet y algunos juguetes livianos.
* Uno de los momentos decisivos del vuelo es el aterrizaje, ya que a veces la descompresión produce dolor en los oídos y los pequeños tienden a desesperarse. Para prevenir esto, cuando el avión empiece su descenso dale un chicle para que mastique y asi evitarán que se le tapen los oídos.

Siguiendo estos consejos te auguramos una excelente experiencia al volar con tu pollito. ¡Buen viaje!

Tuesday, November 13, 2012

#Convierte la sala de tu #casa en su #cine favorito


Ir al cine con nuestros pollitos puede ameritar el despliegue de una gran logística que incluye desde arreglarlos para salir, hasta manejar, gastar dinero en la compra de entradas y dulces, procurar mantenerlos calmados y en silencio durante la función para que no molesten al resto de los asistentes, etc. Por ello, cuando finalmente aparece en pantalla el ansiado “y vivieron felices para siempre”, muchas nos sentimos ya agotadas y listas para volver a casa. Pero… ¿qué tal si aplicáramos aquello de “si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma?


Foto cortesía de: blogs.babble.com
Con un poquito de imaginación y mucho de cariño, la sala de tu casa pudiera convertirse en la mejor sala de cine a la que tus chiquitos hayan asistido jamás. Aquí algunas ideas que harán de estas funciones una ocasion familiar y especial: 
  • Prepara los tickets. Con cartulinas de colores, tijera y marcadores realiza unos sencillos, pero llamativos pases con el nombre de tu pollito incluído. Si la función será en horas de la noche, entrégale su entrada en el día y pídele que la guarde bien, pues no cualquiera entrará a esta proyección. Sólo serán admitidos  invitados especiales como él (ella).  
  • Asegúrate de que la película sea su favorita. Para ello, hazle una sencilla encuesta en la que le des 3 opciones de películas a ver. Proyecta la que más le guste.
  • Alista deliciosas provisiones. Haz que la sala de tu casa se impregne con el olor más rico y asociado al cine: ¡el de las cotufas! En este caso, las palomitas de maíz para microondas son ideales, ya que su preparación es muy sencilla y están listas “en un 2 x 3”. En lugar de refrescos, que tu cine se distinga por ofrecer ricos jugos de su fruta preferida, bebidas achocolatadas, leche o simplemente agua. Además, coloca un par de lindos bol en las mesitas de tu sala llenos de chocolates y galletas, para que no falte el toque dulce en la velada. 
  • Decora la sala. Mucho dependerá de cuán creativa seas pero, entre otras cosas, puedes buscar en internet e imprimir publicidad de la película que verán y pegarla a modo de posters (tamaño carta) en las paredes o puertas que llevan a tu sala. Si quieres agregar algunos globos a la decoración siéntete libre de hacerlo, porque en tu sala de cine quien decide eres tú.
  • En lugar de cine: autocine! Con la salida de los cines multiplex, poco a poco se ha ido extinguiendo la figura de los autocines, pero aun puedes hacer que tu pollito no sólo la conozcan, sino que además la disfruten. Para ello, sólo toma una caja grande de cartón y abre su tapa superior a fin de que tu niño(a) se siente dentro como si fuera un carrito. Dale vida a su vehículo pegando a los lados de la caja 4 platos plásticos que hagan las veces de ruedas, y dibuja con marcadores de colores los detalles que quieras (ventanas, puertas, calcomanías, etc). A continuación una imagen que te servirá de ejemplo…
Foto cortesía de: http://homebyheidi.blogspot.com
  • Pantalla. Si cuentas con un proyector o video beam puedes desplegar una sábana grande en una de las paredes de tu sala para proyectar el film sobre ella. Si no, utiliza la vía convencional: TV + reproductor de DVD.   
  • Staff 5 estrellas. A la hora acordada para la película, espera a tu pollito parada frente a la sala. Actúa como la mejor de las anfitrionas: dale la bienvenida, pide su entrada, ofrécele su combo de cotufas y jugo, y deséale que disfrute la función. Te aseguramos que se impresionará con la atención del personal de tu cine (puedes pedirle ayuda a tu madre y esposo para atender a los visitantes, y recargar sus snacks y bebidas)
  • Puertas afuera. Si en tu casa cuentas con una terraza al aire libre, prueba instalar allí tu sala de cine. Ningún multiplex, por más grande que sea, podrá superar eso.  
  • Invita a sus mejores amigos. Esta invitación bien puede ser a un par de amiguitos del colegio, vecinos o primos de su edad con los que suela jugar.  Además, despliega en el sofa y frente a la pantalla a sus peluches y juguetes más queridos. Poder compartir esta experiencia con ellos le encantará.

Con estos sencillos tips tu familia no sólo podrá disfrutar de noches mágicas de cine a cambio de una mínima inversión de tiempo, energía y dinero, sino que incluso los asistentes podrán ir en pijama a ver su película favorita si así lo desean. ¿Lista para probarlo? ¡Qué comience la función!


Thursday, November 8, 2012

#Amor al alcance de la mano


Cuando mi hermana estaba pequeña chupó tanto dedo que hoy, a sus casi 30 años de edad, aun luce un dedo gordo chato y arrugado como consecuencia de su tierna afición por llevarse el dedo a la boca. Al igual que ella, muchos niños viven un idilio con su dedito gordo, mientras sus madres se preguntan cómo quitarles esta costumbre.

Aunque se vean adorables cuando lo hacen, chupar dedo puede provocarles inflamación de las encías o gingivitis, además de deformaciones en la mandíbula, dientes (maloclusión bucal por el desplazamiento de los incisivos hacia adelante) y paladar (el arco del paladar se deforma produciéndose un fenómeno conocido como “paladar ojival”).

Sin embargo, hay que trazarse una estrategia a la hora de atacar el problema, pues estamos frente a un hábito que incluso pudiera haber empezado de manera incipiente desde el mismo embarazo (más de una mamá ha podido pillar a su chiquito chupando dedo en el útero a través de un ecosonograma 3D, ¿o no?). Por lo general, los bebés chupan dedo hasta los 4 ó 5 años aproximadamente, así que paciencia.

Lo primero es que entiendas que chupar dedo no es para nada trivial; tiene su explicación. Cuando los bebés dejan de tomar pecho, suplantan ésta mama por la de un chupón o la de un tetero, lo que le permite relajarse, encontrar consuelo y sosiego, entretenerse, sentirse seguro o simplemente conciliar el sueño. Pero si luego también le quitamos estos artefactos, entonces puede que recurra a “soluciones al alcance de su mano” para sustituir esa sensación placentera por otro estímulo oral ofrecido, en este caso, por su dedito pulgar.


¡Atrapado con las manos en la masa!
Foto cortesía del Pinterest de: Sarah Williams
¡Manos a la obra!
Para empezar no le saques el dedo de la boca, ni lo atormentes con la retahíla de “"deja de chuparte el dedo, pareces un bebé". Bajo ningún concepto hagas mofa de su hábito, ni lo ridiculices. ¡Nada más equivocado y contraproducente que eso! Ponte en su lugar y entiende que para él(ella) chupar dedo es algo placentero, que puede incluso ser fuente de seguridad y consuelo.  

La psicóloga y maestra, Carmen Bayascas, recomienda en el portal  Solohijos.com que reconozcas sus esfuerzos y logros por pequeños que sean. “Establece previamente con tu hijo qué recompensa obtendrá si consigue controlar su conducta al menos en diez ocasiones (…) Por ejemplo: durante dos semanas vas a controlar exclusivamente esta conducta mientras come. Pega o dibuja un sol los días que lo hace correctamente y no le recompenses con ningún dibujo los días que no lo ha conseguido. Al cabo de los días estipulados puedes canjear sus puntos por el premio establecido (hacerle su pastel preferido e invitar a un amigo a merendar, puedes hacerle magia y sacarle de la oreja una bolsa de canicas, caramelos, lápices de colores…)”, aconseja la psicóloga infantil. Es importante que lleves el registro de sus esfuerzos en una cartulina porque así podrá visualizar sus logros y lo mantendrás motivado.

Alíate con su maestra. No pierdas el trabajo hecho en casa durante las horas que tu pollito va al colegio. Para ello, habla con su profesora, ponla al tanto de tu estrategia y pídele apoyo. Aunque ella no le vaya a cocinar una torta a tu nené, bien puede felicitarlo frente a sus compañeritos cuando no se chupe el dedo en clase, por ejemplo. Como verás, éste es el clásico refuerzo positivo… ¡y vaya que sirve!

Prémialo pegando calcomanías (stickers) de sus personajes favoritos en su manito si logra mantener el dedo fuera de la boca por un periodo prolongado de tiempo.

Pospón esta “campaña anti dedo” si tu pollito atraviesa algún momento delicado o estresante como puede ser empezar en un colegio o tener un hermanito.

Si tu hijo ya está grandecito (digamos 4 años), intenta hacer que desista de este hábito mediante una explicación clara y sencilla. A mi mamá le funcionó decirle a mi hermana que se le volarían los dientes y después tendrían que visitar al dentista. ¡Santo remedio!

En todo caso, siempre ten presente que ésta es una carrera de largo aliento. Así como el mundo no se creó en 2 días, tu bebé también necesita tiempo para desapegarse de su “amado dedo”. Apóyalo, anímalo y acompáñalo en el camino a la meta con mucho amor.

… Si crees que este post te ofreció tips útiles compártelo con otras mamás, y siéntete libre de contarnos cuál fue tu experiencia al implementar estas tácticas. ¡Que tengas la mejor de las suertes! 

Corina Díaz- Content Manager Pollito Inglés
E-mail: Corina@pollitoingles.com

Wednesday, November 7, 2012

Recupera tu #figura tras el #embarazo


Romper fuente, correr a la clínica, lidiar con las contracciones, dar a luz, atender las visitas de familiares y amigos, etc, etc, etc… Cuando un bebé está por nacer, las mamás vivimos una vorágine de experiencias y emociones que sin duda roban nuestra atención por un buen rato. Sin embargo, cuando baja la marea y finalmente podemos tomarnos un minuto para ver cómo lucimos, muchas encontramos una imagen poco halagadora como resultado de 9 meses de gestación. Si te quieres reconciliar con el espejo, este post te dará algunas pistas para lograrlo.

Antes que nada debes saber que un trabajo aeróbico con intensidad de baja a moderada desde el embarazo es muy importante, ya que mantiene los músculos tonificados (importante a la hora del parto), colabora en el control de peso durante la gestación y conserva el buen ritmo del metabolismo.

El Pilates es una buena opción para ejercitarse en esta etapa, siempre y cuando tu parto vaya a ser   por vía vaginal y no haya riesgos de por medio. Esta práctica no sólo tonifica, sino que también previene futuros problemas de incontinencia urinaria. Pero, si no eres fan del Pilates, hay muchas otras opciones como por ejemplo el yoga. Lo importante es que la actividad física que escojas  no eleve tu frecuencia cardíaca, pues podría restarle oxígeno al bebé.

Foto cortesía de: Whattoexpect.com
Ahora bien, una vez que ya hayas traído a tu pollito al mundo ten en cuenta lo siguiente:
*Estudios realizados por el doctor Alex Kojo Anderson, de la Universidad de Georgia en Atenas, encontraron que la lactancia exclusiva ayuda las mujeres a perder más rápido el peso acumulado durante el embarazo que el uso de fórmula, así lo reseña Reuters Health.
*En general, después del parto las madres deben empezar a ejercitarse de manera gradual y fortalecer el suelo pélvico.
*Cuando el parto es por cesárea: lo ideal es que esperes al menos 2 meses antes de iniciar una rutina de ejercicio. Sin embargo, es recomendable que a la semana de dar a luz comiences a hacer caminatas cortas a paso lento, pues te ayudará a evitar posibles complicaciones como formación de coágulos de sangre.
*Cuando el parto es natural (y más aun si te mantuviste haciendo ejercicio durante el embarazo): puedes retomar la actividad física al cabo de un mes. Empieza con caminatas de 30 minutos a ritmo lento o moderado, 3 veces por semana. Si quieres añadir algo de resistencia al ejercicio, realiza esta caminata mientras paseas a tu pollito en su coche.

Cualquiera que sea tu caso, siempre consulta al especialista antes de comenzar a ejercitarte. Además, si tu presupuesto te lo permite recuerda que en algunos gimnasios cuentan con entrenadores especializados en ejercicios postparto. Lo esencial es que en una primera etapa no te excedas y te enfoques en ejercicios de bajo impacto, que se concentren en la tonificación y el estiramiento.

Foto cortesía de: Livestrong.com

No presiones a tu cuerpo
¿Quién no sueña con copiar a la famosa presentadora de Project Runaway, Heidi Klum, quien a pocas semanas de dar a luz ya paseaba su esbelta figura por la pasarela de Victoria Secrets? ¡Probablemente todas! Sin embargo, si eres paciente y perseverante tu también podras hacer realidad tu sueño de recuperar tu figura. Pretender lucir unas medidas 90-60-90 después de 9 meses de embarazo, es casi misión imposible.

Para deshacerte de los kilos extra lo mejor es que ataques el sobrepeso por 2 flancos: dieta y ejercicio, así que además de activarte físicamente, acude a un nutricionista que te asesore en términos de alimentación postparto. Evita cambios o restricciones bruscas en la dieta que pudieran afectar a tu bebé.

Finalmente, y antes de despedirnos por este post, te recordamos que los especialistas sugieren no bajar más de medio kilo por semana, sobre todo si estás dando pecho. Recuerda el viejo dicho de la sabiduría popular: “del apuro no queda sino el cansancio”.  
Related Posts with Thumbnails